El Algarve posee las mejores condiciones climatológicas de Europa a lo largo de todo el año. Caracterizada por escasos períodos de precipitaciones, generalmente concentrados en los meses de noviembre y marzo, y por un alto nivel de sol, la región algarvía presenta perfectas condiciones meteorológicas para el desarrollo de la actividad turística a lo largo de todo el año.
Durante el verano las temperaturas son elevadas, lo que propicia el turismo de «Sol y Mar» y convierte al Algarve en un auténtico paraíso para los bañistas. Se trata de una región caracterizada por su arena blanca y fina, que se extiende por kilómetros de costa, y bañada por un mar calmo, con temperaturas tibias que rondan los 22 grados centígrados durante el verano.
Debido a su relieve y a su ubicación geográfica, el Algarve recibe variadísimas influencias climáticas: del continente europeo al norte de África, del Océano Atlántico al Mediterráneo. Las temperaturas máximas oscilan, a lo largo del año, entre los 15 y los 31 grados centígrados, no registrándose mínimas negativas en invierno, estación donde los días soleados hacen que los turistas de los países del norte de Europa visiten el Algarve.
Temperaturas medias
Aire en Verano: De 24º C a 29º C
Aire en Invierno: De 15º C a 18º C
Mar en Verano: De 21º C a 24º C
Mar en Invierno: De 15º C a 19º C